Viernes, 14 de marzo, 2025
Ante la noticia de la absolución de 45 integrantes de las Madres del Sábado, objeto de procesamiento después de que su vigilia pacífica número 700 de protesta por sus seres queridos sometidos a desaparición forzada se prohibiera y se dispersara violentamente en agosto de 2018, Dinushika Dissanayake, directora adjunta de Amnistía Internacional para Europa, ha declarado:
“Casi siete años después de que la policía antidisturbios disolviera con violencia la vigilia número 700 de la Madres del Sábado, 45 personas que estaban siendo juzgadas por participar en la vigilia han sido absueltas finalmente y su suplicio ha terminado. Un procesamiento que nunca debería haber llegado a serlo se prolongó durante años.”
Durante más de mil sábados desde 1995, las Madres del Sábado y sus simpatizantes se han convertido en un poderoso símbolo de la importancia de la protesta pacífica.
“Las autoridades deben sacar la conclusión obligada de este resultado tan esperado: Los Madres/Personas del Sábado tienen derecho a reunirse en la plaza Galatasaray todos los sábados para exigir justicia por sus seres queridos desaparecidos. Pedimos al ministro del Interior, Ali Yerlikaya, que garantice el levantamiento inmediato y permanente de todas las restricciones vigentes a las reuniones en la plaza.”
“Durante más de mil sábados desde 1995, las Madres del Sábado y sus simpatizantes se han convertido en un poderoso símbolo de la importancia de la protesta pacífica. Debemos defender este derecho incluso frente a la represión, la violencia, la detención y los enjuiciamientos.”
Información complementaria
Las Madres/Personas del Sábado son familiares de víctimas de desaparición forzada durante las décadas de 1980 y 1990, y llevan celebrando una vigilia pacífica en el mismo lugar todos los sábados desde mayo de 1995. El 25 de agosto de 2018, la vigilia número 700 fue prohibida por el gobernador del distrito de Beyoğlu por el motivo espurio de que las autoridades no habían recibido notificación de la vigilia 48 horas antes de su celebración.
La policía disolvió la vigilia empleando gas lacrimógeno y cañones de agua y detuvo a 46 personas que posteriormente quedaron en libertad pero contra quienes dos años después, en 2020, se formuló el cargo de “asistir a reuniones y marchas ilegales sin armas y no dispersarse a pesar de los avisos”. La primera vista del juicio, inicialmente contra 46 personas, se celebró en marzo de 2021. En 2024, una de las 46 personas acusadas quedó separada de la causa por su ausencia en las actuaciones judiciales. De haber sido declaradas culpables, las 45 personas acusadas podrían haber tenido que cumplir hasta tres años de cárcel cada una.