Miércoles, 12 de marzo, 2025

Ante la decisión del Tribunal Supremo de Rusia de confirmar la pena de 12 años de prisión impuesta a Mark Kislitsyn, activista ruso transgénero y antibelicista, Natalia Prilutskaya, investigadora de Amnistía Internacional sobre Rusia, ha declarado:

“Encarcelar a Mark Kislitsyn en una colonia penal por cargos de ‘traición’ por transferir 10 dólares estadounidenses a una cuenta en Ucrania desafía el sentido común. El auténtico propósito de este enjuiciamiento no es proteger la seguridad del Estado, sino castigar a un activista de derechos humanos por su postura antibelicista. La implacable persecución y los malos tratos sufridos, incluida la negación de la atención médica que necesita como hombre transgénero y los periodos prolongados de reclusión arbitraria en una celda de castigo —casi siempre en régimen de aislamiento—, así lo demuestran. Exigimos la liberación inmediata de Mark Kislitsyn y que se ponga fin a la persecución de cualquier activista antibelicista en Rusia.”

“En una carta escrita en la cárcel, Mark Kislitsyn afirmó: “Quienes tratan de intimidarme… pueden hacerme algo de daño, pero hagan lo que hagan, no conseguirán que renuncie a mis convicciones, que pierda el sentimiento de pertenencia a mi país, y ni siquiera que me ponga de mal humor”, y añadió que quiere que Rusia “sea un hogar y no una prisión.”

Quienes tratan de intimidarme… pueden hacerme algo de daño, pero hagan lo que hagan, no conseguirán que renuncie a mis convicciones, que pierda el sentimiento de pertenencia a mi país, y ni siquiera que me ponga de mal humor.

Mark Kislitsyn

Información complementaria

Mark Kislitsyn, activista LGBTI de Moscú, protestó contra la invasión en gran escala de Ucrania en febrero de 2022 y la criticó en las redes sociales. El 28 de febrero de 2022, fue detenido y multado por su piquete antibelicista. Lo arrestaron de nuevo el 12 de julio de 2023 por cargos de “alta traición” (artículo 275 del Código Penal ruso). Las autoridades rusas sostienen que, horas después de la invasión, Mark Kislitsyn envió 865 rublos (unos 10 dólares) a una cuenta bancaria ucraniana, que, según las autoridades, recolectaba “donaciones para cubrir las necesidades de las fuerzas armadas ucranianas”.

El 23 de diciembre de 2023, el Tribunal Municipal de Moscú condenó a Mark Kislitsyn a 12 años en una colonia penitenciaria. Mark Kislitsyn, que es un hombre transgénero, fue enviado a la colonia penal para mujeres IK-9 de Novosibirsk (Siberia Occidental), donde se le obliga a vestir ropa de mujer. Se le niega el acceso a tratamiento hormonal de afirmación de género, lo que pone en grave riesgo su salud.

Desde noviembre de 2024, Mark Kislitsyn ha sido recluido arbitrariamente en repetidas ocasiones en una celda de castigo (denominada SHIZO) por motivos espurios. En el momento en que expire su castigo actual, el 17 de marzo, habrá pasado más de 70 días en una SHIZO. Está recluido en condiciones inhumanas y degradantes, que incluyen reclusión prolongada en régimen de aislamiento y frío entumecedor.