Lunes, 10 de febrero, 2025

La liberación largamente esperada del trabajador humanitario palestino y preso de conciencia Mohammed al Halabi en el marco del acuerdo de intercambio de prisioneros y rehenes entre Israel y Hamás pone fin a su angustioso calvario y a un flagrante error judicial, ha afirmado hoy Amnistía Internacional, reiterando su llamamiento a la liberación inmediata de todos los rehenes civiles de Gaza y de los palestinos detenidos arbitrariamente en Israel.

Al Halabi, exdirector en Gaza de la organización de ayuda humanitaria y desarrollo World Vision, fue detenido por la Agencia de Seguridad de Israel en el paso de Erez, entre Israel y la Gaza ocupada, el 15 de junio de 2016. Fue interrogado sin abogado, torturado, juzgado en vistas secretas y declarado culpable tras un juicio manifiestamente injusto basado en pruebas no reveladas de que presuntamente había desviado fondos a Hamás. En agosto de 2022, fue condenado a 12 años de prisión por el Tribunal de Distrito de Beersheba.

En el momento de su liberación, el 1 de febrero de 2025, Al Halabi presentaba signos visibles de tortura e inanición, incluida una alarmante pérdida de peso.

“Mohammed al Halabi fue injustamente perseguido por las autoridades israelíes por su labor humanitaria. Nunca debió haber sido detenido, mucho menos obligado a pasar casi nueve años encarcelado injustamente. El kafkiano proceso judicial al que fue sometido, incluida su prolongada detención en espera de juicio, los múltiples aplazamientos de su juicio, que duró seis años, y el injusto fallo condenatorio que se dictó contra él, basado en gran medida en la declaración de un preso informante, fueron un terrible error judicial”, declaró Erika Guevara Rosas, directora general de Investigación, Incidencia, Política y Campañas de Amnistía Internacional.

Mohammed al Halabi fue injustamente perseguido por las autoridades israelíes por su labor humanitaria. Nunca debió haber sido detenido, mucho menos obligado a pasar casi nueve años encarcelado injustamente.

Erika Guevara Rosas, Amnistía Internacional

“El fallo condenatorio erróneo de Mohammed al Halabi debe ser anulado. La tortura, junto con los demás malos tratos a los que fue sometido tanto durante el interrogatorio como en prisión, deben ser investigados de forma independiente y los responsables deben rendir cuentas.” 

“Su horrible sufrimiento entre rejas demuestra cómo el discriminatorio sistema judicial israelí contribuye a mantener el cruel sistema de apartheid contra la población palestina. También subraya la urgencia de que las autoridades israelíes dejen en libertad a todas las personas palestinas que están detenidas arbitrariamente en prisiones de Israel.”

La fiscalía israelí no fundamentó en ningún momento del proceso las acusaciones de que Al Halabi era culpable de desviar fondos a Hamás; basó los cargos contra él en pruebas “secretas” y en la declaración bajo coacción de un preso informante. Pese estar bajo enorme presión, Al Halabi rechazó en reiteradas ocasiones entablar una negociación de cargos que le habría permitido reducir significativamente su condena a cambio de “confesar” los cargos que vehementemente negó.

En una conversación con Amnistía Internacional después de su liberación y su retorno a su hogar, gravemente dañado, en Ciudad de Gaza, Al Halabi dijo: “Me torturaron [las autoridades israelíes], pero nunca quebraron mi espíritu. Mantengo mi inocencia por todos los cargos que se me imputan y el empeño de demostrarlo ante los tribunales incluso después de mi puesta en libertad”.

Describió que después del 7 de octubre de 2023 lo habían trasladado a la prisión de Nafha, en el sur de Israel, donde se confiscaron las radios de los presos y se denegaron casi todas las visitas de abogados, así como cualquier contacto con familiares u observadores independientes. A lo largo de los 15 meses de conflicto, apenas recibió alguna noticia sobre sus seres queridos en Gaza en la única ocasión en que pudo reunirse con su abogado.

“Eso fue lo peor: no saber si mi mujer y mis hijos estaban vivos, no saber cómo se las arreglaban. Si habían sido desplazados o bombardeados; o si volvería a verlos algún día. Eso fue incluso peor que el hambre y las torturas a las que nos sometieron [en prisión].”

Eso fue lo peor: no saber si mi mujer y mis hijos estaban vivos, no saber cómo se las arreglaban. Si habían sido desplazados o bombardeados; O si volvería a verlos algún día. 

Mohammed al Halabi, trabajador humanitario palestino

Al Halabi también contó a Amnistía Internacional que tenía ganas de retomar su trabajo humanitario:

“La necesidad de ayuda humanitaria, el campo en el que trabajaba antes de mi detención, es ahora mayor que nunca. En guerras anteriores solíamos clasificar los edificios dañados entre los que estaban totalmente destruidos y los que estaban parcialmente destruidos, pero cuando volví al campo de refugiados de Yabalia [en la gobernación del Norte de Gaza] descubrí que la categoría de edificios parcialmente destruidos prácticamente no existe. Casi todos los edificios están arrasados.”

Al Halabi expresó su gratitud por el apoyo público que recibió desde todos los rincones del mundo tras su detención: “Incluso en mis horas más oscuras, sabía que mucha gente creía en mi inocencia, que los partidarios de la justicia hacían campaña por mi liberación. Su solidaridad siempre estará grabada en mi corazón.”

Información general

El 30 de agosto de 2022, Mohammed al Halabi fue condenado a 12 años de prisión por el Tribunal de Distrito de Beersheba. Interpuso un recurso contra su condena ante el Tribunal Supremo israelí —Tribunal Superior de Apelaciones en funciones—, y el recurso quedó pendiente hasta su liberación el 1 de febrero durante el intercambio de prisioneros acordado entre Israel y Hamás. Amnistía Internacional lo designó preso de conciencia en mayo de 2023 al concluir que las autoridades israelíes habían actuado contra él con el propósito de intimidar a otros defensores y defensoras de los derechos humanos y reducir el espacio de la labor humanitaria en Gaza en ese momento.

Mohammed al Halabi fue liberado en la cuarta tanda del canje de prisioneros por rehenes entre Israel y Hamás. Amnistía Internacional también reitera su llamamiento a Hamás y a otros grupos armados para que liberen de forma inmediata e incondicional a todos los civiles retenidos como rehenes en Gaza, y a Israel para que libere a todos los palestinos detenidos arbitrariamente, incluidos los que han sido sometidos a desaparición forzada o recluidos en régimen de incomunicación.

Encontrarán más información en: https://www.amnesty.org/es/documents/mde15/6714/2023/es/