Martes, 07 de enero, 2025

Ante la noticia de que el presidente de Zimbabue, Emmerson Mnangagwa, ha firmado hoy la entrada en vigor de la Ley sobre la Abolición de la Pena de Muerte, la directora ejecutiva de Amnistía Internacional Zimbabue, Lucia Masuka, ha declarado:


“Amnistía Internacional aplaude la decisión de Zimbabue de abolir la pena de muerte para todos los delitos, pero lamenta la posibilidad de que, en virtud de la Ley de Defensa, se pueda reinstaurar en caso de estado de excepción”.

“Esto no es sólo un gran avance para Zimbabue, también es un rayo de esperanza para el movimiento abolicionista en la región, y un gran hito en el intento colectivo de poner fin a este exponente máximo de pena cruel, inhumana y degradante.”

“Al promulgar la Ley sobre la Abolición de la Pena de Muerte, Zimbabue ha dado un gran paso adelante para alinear sus leyes con las normas internacionales de derechos humanos. Además, esta acción transmite un claro mensaje sobre la importancia fundamental de proteger el derecho a la vida y a la dignidad humana.”

“Instamos a las autoridades a que ahora se muevan rápidamente para instaurar la abolición total de la pena de muerte eliminando la cláusula incluida en las reformas al proyecto de ley que permite utilizar la pena de muerte mientras dure cualquier tipo de estado de excepción pública.”

Información complementaria

Antes de la entrada en vigor hoy de la Ley, el Código Penal de Zimbabue, su Código de Procedimiento Penal y su Ley de Defensa permitían imponer la pena de muerte en los casos de asesinato cometido en circunstancias agravantes. Una nueva disposición de la Ley de Defensa introducida por la Ley de Abolición de la Pena de Muerte de 2024 permite la reinstauración de la pena de muerte cuando se declare cualquier estado de excepción pública en virtud de la sección 113 de la Constitución.

Al concluir 2023 se tenía constancia de al menos 59 personas condenadas a muerte en Zimbabue.

En la actualidad, 24 países africanos han abolido en su totalidad la pena de muerte; entre ellos se encuentran cuatro países —Chad, República Centroafricana, Sierra Leona y Zambia— que la han abolido desde 2020. En todo el mundo hay 113 países que son totalmente abolicionistas.