Martes, 10 de mayo, 2022

Abdulrahman al Sadhan, que trabajaba con la red humanitaria de la Media Luna Roja Internacional en Riad, fue detenido el 12 de marzo de 2018 y posteriormente recluido en régimen de incomunicación y sometido a desaparición forzada durante dos años por administrar una cuenta satírica en Twitter


Las autoridades de Arabia Saudí están utilizando la prohibición arbitraria de viajar como instrumento para castigar y controlar a activistas, escritores y escritoras y periodistas, encerrándolos en el país, o, cuando viven fuera de él, impidiendo que sus familiares viajen al extranjero, manifestó hoy Amnistía Internacional con ocasión del lanzamiento de una nueva campaña.

La campaña, “#LetThemFly” (#DéjenlosVolar), documenta los casos de 30 defensores y defensoras de los derechos humanos de Arabia Saudí que fueron condenados a prisión tras juicios manifiestamente injustos y sometidos a la prohibición de viajar inmediatamente después de cumplir la pena de cárcel. Además, documenta los casos de 39 familiares de activistas que también se encontraron sometidos a la prohibición de viajar —sin orden oficial ni ninguna otra forma de notificación—, lo que en la práctica supone la separación forzosa de familias.

“El uso arbitrario de la prohibición de viajar por las autoridades Saudíes contra activistas y defensores y defensoras de los derechos humanos refleja un panorama sombrío en el país, donde se sigue silenciando implacablemente a las voces disidentes mientras que los dirigentes hablan de reforma progresiva”, manifestó Lynn Maalouf, directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África.

“Los y las activistas que se atrevieron a expresar cualquier forma de crítica u opinión que no fuera del gusto de las autoridades del país son ahora víctimas de prohibiciones de viajar ilegítimas y punitivas que restringen su libertad de circulación de manera efectiva y afectan a decisiones vitales importantes. Las autoridades saudíes deben levantar la prohibición arbitraria de viajar en todos los casos, dejar de utilizar esta práctica revanchista y empezar a respetar los derechos de libertad de expresión y circulación.”

Vidas restringidas cruelmente

Amnistía Internacional habló con ocho activistas saudíes a los que las autoridades les habían impuesto a ellos mismos o a miembros de sus familias residentes en Arabia Saudí la prohibición arbitraria de viajar. Los que vivían en el extranjero dijeron que tenían dificultades emocionales, porque no podían ver a sus familiares ni visitar su país de origen. Temían ser detenidos y recluidos arbitrariamente si regresaban a Arabia Saudí.

El 11 de marzo de 2022, Raif Badawi, bloguero y activista saudí, quedó en libertad tras cumplir una pena de 10 años de prisión. Pero a menos que se levante la prohibición de viajar que se le impuso, no podrá reunirse con su esposa y sus hijos durante otros 10 años. Su condena se dictó tras un juicio sin garantías, y se basó en cargos derivados únicamente de que había creado un foro de debate en Internet, hecho por el que se le acusó de insultar al islam. Raif Badawi también fue condenado a una pena de 1.000 latigazos, los primeros 50 de los cuales le fueron administrados en una plaza pública de Yeda el 9 de enero de 2015, violando la tortura y otros malos tratos.

Abdulrahman al Sadhan, que trabajaba con la red humanitaria de la Media Luna Roja Internacional en Riad, fue detenido el 12 de marzo de 2018 y posteriormente recluido en régimen de incomunicación y sometido a desaparición forzada durante dos años por administrar una cuenta satírica en Twitter. El 5 de abril de 2020 fue condenado a 20 años de prisión y a 20 años más sin poder viajar únicamente por ejercer su derecho a la libertad de expresión. Actualmente continúa recluido y privado de atención de la salud adecuada y de contacto regular con su familia.

“Están destrozando familias”

La hermana de Abdulrahman al Sadhan, Areej Al Sadhan, que vive en Estados Unidos, contó a Amnistía Internacional que la prohibición de viajar priva a la gente de la oportunidad de vivir una vida normal, puesto que interfiere con la vida social y profesional. Añadió que la separación forzosa de la familia tiene un enorme coste psicológico y emocional.

“Están destrozando familias. Es injusto, ilegal e inhumano”, afirmó Areej Al Sadhan. “La prohibición de viajar convierte a Arabia Saudí en la prisión, el lugar de castigo, un lugar que restringe la libertad personal y aliena de su país de origen a ciudadanos y ciudadanas saudíes.”

Información complementaria

Arabia Saudí lleva años empleando la prohibición de viajar para eliminar las voces críticas y disidentes tanto dentro como fuera del país.

En la purga del hotel Ritz Carlton de noviembre de 2017, las autoridades impusieron la prohibición de viajar a aproximadamente 300 personas entre las que había miembros de la familia real saudí.

En octubre de 2021, Iniciativa por la Libertad, una organización de derechos humanos con sede en Estados Unidos que hace campaña por la puesta en libertad de los presos recluidos indebidamente en Oriente Medio y el Norte de África, publicó un informe en el que documentaba los casos de al menos 89 “personas de Estados Unidos” (personas de nacionalidad estadounidense o que residen legalmente de forma permanente en el país) que habían sido detenidas o a las que se les había impuesto la prohibición de viajar en Arabia Saudí.