Martes, 08 de septiembre, 2020
Teniendo en cuenta las décadas de impunidad en Líbano y la magnitud de la tragedia, un mecanismo internacional de investigación es la única manera de garantizar los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación
Un mes después de la mortal explosión en el puerto de Beirut, ha quedado cada vez más claro que los procesos establecidos por las autoridades libanesas para investigar los trágicos sucesos del 4 de agosto no son ni independientes ni imparciales. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional en una detallada declaración. La organización reitera su petición de que se establezca un mecanismo internacional de investigación para garantizar los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación.
Desde la trágica explosión, en la que murieron al menos 190 personas, más de 6.500 resultaron heridas y unas 300.000 tuvieron que desplazarse o perdieron su hogar, las víctimas, sus familiares y otras organizaciones de derechos humanos han pedido una investigación internacional. Las autoridades libanesas, incluido el presidente, han rechazado esas peticiones. La rendición de cuentas era otra de las principales peticiones realizadas por las miles de personas que se manifestaron saliendo a las calles cuatro días después de la explosión y se encontraron como respuesta con el uso excesivo de la fuerza por parte del ejército y las fuerzas de seguridad, una fuerza que causó heridas a cientos de personas que vinieron a sumarse a las miles más heridas por la explosión.
Lynn Maalouf, directora regional en funciones de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África, ha manifestado:
“Más de un mes después de la explosión, todos los pasos o medidas adoptados o las declaraciones realizadas hasta el momento, especialmente por los más altos cargos del país, han dejado claro que las autoridades no tienen ninguna intención de cumplir con su responsabilidad de llevar a cabo una investigación efectiva, transparente e imparcial.”
“El gobierno remitió la investigación al Consejo Judicial, un tribunal cuyos procedimientos carecen inherentemente de independencia e imparcialidad y no cumplen las normas internacionales de justicia procesal. Resulta extraordinario que, en un caso en el que hay denuncias tan graves contra órganos estatales, el Consejo Judicial no tenga jurisdicción para procesar a altos cargos en activo, incluidos el presidente y sus ministros.”
“Teniendo en cuenta las décadas de impunidad en Líbano y la magnitud de la tragedia, un mecanismo internacional de investigación es la única manera de garantizar los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación. Esta investigación debe tener como cometido evaluar las responsabilidades respecto a la explosión y a las muertes, heridas y destrucción causadas por ella, y hacer públicos sus resultados. La investigación debe ser exhaustiva, independiente, imparcial y transparente.”