Martes, 10 de septiembre, 2019
“La gravedad de las conclusiones de la alta comisionada es una señal de alarma para el Consejo de Derechos Humanos, que debe establecer cuanto antes una comisión de investigación sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela", declaró Fernanda Doz Costa, directora adjunta de Amnistía Internacional para las Américas
Al inaugurar hoy una sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, ha expuesto sus motivos de preocupación sobre el deterioro continuado de la crisis de derechos humanos en Venezuela, y sobre la falta de rendición de cuentas incluso por las violaciones más graves de derechos humanos.
En respuesta a la actualización de la alta comisionada, Fernanda Doz Costa, directora adjunta de Amnistía Internacional para las Américas, ha manifestado:
“La gravedad de las conclusiones de la alta comisionada es una señal de alarma para el Consejo de Derechos Humanos, que debe establecer cuanto antes una comisión de investigación sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela. Junto a más de un centenar de ONG venezolanas e internacionales, Amnistía Internacional ha pedido reiteradamente una investigación para monitorear la crisis de derechos humanos e informar sobre ella, y para aclarar la responsabilidad de los crímenes de derecho internacional y las graves violaciones de derechos humanos".
La gravedad de las conclusiones de la alta comisionada es una señal de alarma para el Consejo de Derechos Humanos, que debe establecer cuanto antes una comisión de investigación sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela.
Fernanda Doz Costa, directora adjunta de Amnistía Internacional para las Américas
“Persiste la escalada de la crisis de derechos humanos y millones de personas continúan sufriendo en Venezuela mientras prevalece la impunidad. Amnistía Internacional ha concluido recientemente que las selectivas ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias y muertes y lesiones por uso excesivo de la fuerza forman parte de un ataque sistemático y generalizado del gobierno de Nicolás Maduro contra la población civil y pueden constituir crímenes contra la humanidad.
Ante las escasas perspectivas de obtener justicia, verdad y reparación en el ámbito nacional o regional, tenemos la mirada puesta en todos los miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para que respalden al pueblo venezolano apoyando la creación de una comisión de investigación de la ONU. Transmitiría a víctimas y perpetradores por igual el mensaje de que la comunidad internacional no los olvidará ni permitirá que las violaciones de derechos humanos graves y continuadas queden impunes".