Martes, 10 de septiembre, 2019
“Oleg Sentsov y muchas otras personas encarceladas tras la ocupación y anexión ilegal de Crimea por Rusia son simples víctimas de una persecución por motivos políticos y jamás deberían haber estado en prisión. Aunque es un alivio que ya estén en libertad, es una farsa que las utilicen como moneda de cambio en acuerdos políticos", declaró Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central
En respuesta a la noticia de que el cineasta ucraniano Oleg Sentsov y varias decenas de personas detenidas más han sido puestas en libertad en un canje de presos entre Rusia y Ucrania, Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha dicho:
“Oleg Sentsov y muchas otras personas encarceladas tras la ocupación y anexión ilegal de Crimea por Rusia son simples víctimas de una persecución por motivos políticos y jamás deberían haber estado en prisión. Aunque es un alivio que ya estén en libertad, es una farsa que las utilicen como moneda de cambio en acuerdos políticos.
“El conflicto en el este de Ucrania supuso la apertura de un nuevo y trágico capítulo para los derechos humanos en el país y fuera de él. Tras ser detenido, trasladado ilegalmente a Rusia y juzgado por un tribunal militar en un su juicio plagado de irregularidades, Oleg Sentsov ha pasado más de seis años entre rejas.
“Las autoridades rusas se negaron a reconocer su ciudadanía ucraniana y se lo llevaron a 3.000 kilómetros de su familia y de su nativa Crimea a una helada colonia penitenciaria en Labytnangi, en el extremo septentrional de Rusia.
“Ninguna persona debe ser procesada y encarcelada sólo por motivos políticos; exigimos justicia para todas las personas aún presas que han sido sometidas a estos juicios por motivos políticos, las que han sido encarceladas únicamente por ejercer sus derechos humanos deben quedar inmediatamente en libertad sin condiciones".
Información complementaria
El 7 de septiembre, Rusia y Ucrania realizaron el canje de 70 personas que estaban presas en ambos países. Entre ellas están los 24 marineros ucranianos capturados ante las costas de Crimea el año pasado y el cineasta ucraniano Oleg Sentsov. En 2015, Oleg fue condenado a 20 años de cárcel tras ser declarado culpable de “terrorismo” en un juicio injusto. Oleg había expresado su oposición a la ocupación rusa de Crimea.