Jueves, 04 de abril, 2019
El 27 de febrero, un juez del Tribunal de Cabinda ordenó la puesta en libertad provisional de 13 manifestantes, tras haber declarado ilegal su detención sin orden judicial. Asimismo, ordenó que otros 50 manifestantes permanecieran recluidos. De éstos, la única mujer se encuentra en la prisión de Yabi, mientras que los 49 hombres están en la prisión Civil de la provincia de Cabinda
Actúen: redacten su propio llamamiento o utilicen esta carta modelo
Ministro de Justicia y Derechos Humanos / Minister of Justice and Human Rights
Francisco Manuel Monteiro de Queiroz
Ministério da Justiça e dos Direitos Humanos
Rua 17 de Setembro,
Luanda, Angola
Correo-e: anaceleste.januario@minjusdh.gov.ao
Señor Ministro:
Me dirijo a usted en relación con el caso de 50 manifestantes que permanecen arbitrariamente recluidos en Angola en virtud de un fallo judicial emitido por el Tribunal de Cabinda el 27 de febrero. El juez en cuestión determinó que su detención sin orden judicial era legal porque habían sido detenidos mientras protestaban en la calle. La única mujer de estos 50 manifestantes se encuentra recluida en la prisión de Yabi, mientras que los 49 hombres permanecen en la prisión civil de la provincia de Cabinda. Están siendo investigados por los delitos de “asociación criminal” (artículo 8 de la ley 3/14), “rebelión” (artículo 21 de la ley 23/10), “ultraje al Estado” (artículo 25 de la ley 23/10) y “alteración del orden público y resistencia” (artículos 185 y 186 del Código Penal).
Ese mismo día, el juez ordenó la puesta en libertad provisional de otros 13 manifestantes, tras haber declarado ilegal su detención sin orden judicial en sus respectivos domicilios.
Desde el 28 de enero hasta el 1 de marzo, las fuerzas de seguridad angoleñas detuvieron a 62 manifestantes —entre ellos, activistas del Movimiento Independentista de Cabinda (MIC), junto con familiares y compañeros suyos— por su implicación en el acto pacífico de protesta celebrado el 1 de febrero con motivo de 134º aniversario de la firma del Tratado de Simulambuco. El 12 de febrero, la policía detuvo a otra persona en relación con el mencionado acto pacífico.
La represión de manifestantes pacíficos por las autoridades en Cabinda socava los derechos a la libertad de expresión y de reunión pacífica en Angola. Por consiguiente, le insto a:
- Garantizar la liberación inmediata e incondicional de estos 50 manifestantes, detenidos únicamente por haber ejercido sus derechos a la libertad de expresión y de reunión pacífica;
- Garantizar el pleno respeto de los derechos a la libertad de expresión y de reunión pacífica, y asegurar a las personas activistas de Cabinda que se protegerá su derecho a expresar sus opiniones libremente, sin temor a represalias ni a restricciones ilegítimas.
Atentamente,
[NOMBRE]
Información complementaria
El Tratado de Simulambuco, firmado el 1 de febrero de 1885, otorgó a Cabinda la condición de protectorado de la corona portuguesa.
El 7 de enero, la secretaría general del Movimiento Independentista de Cabinda (MIC) envió una notificación al presidente de la República de Angola, João Manuel Gonçalves Lourenço, con copia al Gobierno Provincial de Cabinda, a la Comandancia Provincial de la Policía, a la Fiscalía General de la República, a los partidos políticos angoleños y a otras autoridades del país, para informarles sobre la manifestación pacífica convocada para el 1 de febrero. El MIC solicitó que la policía angoleña estuviera presente en la manifestación para garantizar la seguridad de los participantes.
Cabinda está situada en una estrecha franja de terreno entre la República Democrática del Congo y la República del Congo. Es internacionalmente reconocida como parte de Angola y produce la mayoría de las exportaciones de petróleo del país. Desde hace más de 20 años, grupos separatistas aspiran a lograr la autonomía o la independencia de Angola. Los intentos del gobierno angoleño de negociar con representantes de los grupos separatistas de Cabinda han sido infructuosos.
E 28 de enero, las fuerzas de seguridad angoleñas arrestaron a ocho jóvenes del MIC en sus respectivos domicilios, en la provincia de Cabinda. Estaban preparando folletos para la manifestación pacífica del 1 de febrero.
Al día siguiente, la policía detuvo a otras 20 personas, entre las que había familiares y colegas de los jóvenes activistas detenidos, cuando se manifestaban pacíficamente para reclamar la puesta en libertad de éstos ante la sede del Servicio de Investigación Criminal de Cabinda.
Pese a ello, el 1 de febrero, se celebró en las calles de Cabinda la manifestación prevista para conmemorar el 134º aniversario de la firma del Tratado de Simulambuco, en la se volvió a pedir la independencia de Cabinda. Asimismo, se pidió la excarcelación de las personas detenidas.
Amnistía Internacional considera preocupantes el empleo continuado de fuerza excesiva contra manifestantes por parte de la policía y la detención arbitraria de quienes se manifiestan. El 1 de marzo, activistas del MIC y familiares de las 50 personas detenidas se disponían a manifestarse en la plaza 1º de Mayo de Cabinda, para pedir que fueran puestas en libertad. Sin embargo, antes de que comenzara el acto, la policía llegó y empezó a agredir a los manifestantes, a puñetazos y patadas. A continuación, detuvo a 11 personas, que, horas después, quedaron en libertad sin cargos. Siete de las personas detenidas tuvieron que ser hospitalizadas por los golpes que les había propinado la policía, y no pudieron volver a su casa hasta el día siguiente.
Pueden escribir llamamientos en: Portugués
También pueden escribir en su propio idioma.
Envíen llamamientos lo antes posible y no más tarde del: 15 de mayo de 2019
Consulten con la oficina de Amnistía Internacional de su país si desean enviar llamamientos después de la fecha indicada.
Nombre y pronombre preferido: Manifestantes de Cabinda (ellos/ellas)
Enlace a la AU anterior: https://www.amnesty.org/es/documents/afr12/9804/2019/es/