Martes, 19 de marzo, 2019
Las autoridades de Bangladesh deben poner en libertad de inmediato y sin condiciones a Mahfuza Akhter Kiron, miembro del consejo de la FIFA (órgano regulador del fútbol internacional), quien se enfrenta a pasar dos años entre rejas sólo por ejercer su derecho a la libertad de expresión; así lo ha afirmado hoy Amnistía Internacional
Las autoridades de Bangladesh deben poner en libertad de inmediato y sin condiciones a Mahfuza Akhter Kiron, miembro del consejo de la FIFA (órgano regulador del fútbol internacional), quien se enfrenta a pasar dos años entre rejas sólo por ejercer su derecho a la libertad de expresión; así lo ha afirmado hoy Amnistía Internacional.
Mahfuza Akhter Kiron, quien también preside el pabellón femenino de la Federación de Fútbol de Bangladesh, fue detenida el 16 de marzo de 2019 en su domicilio de Dacca, en el barrio de Dhanmodi. Se enfrenta a cargos de difamación por haber acusado a la primera ministra, Sheikh Hasina, de anteponer el críquet al fútbol, y un tribunal de Dacca le ha denegado la libertad bajo fianza.
“Defender el fútbol no es delito. Mahfuza Akhter Kiron se limitó a ejercer su derecho a la libertad de expresión al afirmar que la primera ministra anteponía el críquet al fútbol. Si no fueran tan graves las implicaciones de la causa por difamación, daría risa. Mahfuza Akhter Kiron debe quedar en libertad de inmediato y sin condiciones”, ha dicho Saad Hammadi, responsable de campañas de Amnistía Internacional para Asia Meridional.
Si es declarada culpable, Mahfuza Akhter Kiron podría ser condenada hasta a dos años de cárcel en aplicación del Código Penal bangladeshí.
La detención de la representante de la FIFA es el ataque más reciente contra la libertad de expresión en Bangladesh. La promulgación de la draconiana Ley de Seguridad Digital en 2018 ha tenido un efecto paralizante en toda la sociedad civil y en los medios de comunicación, dando lugar a la autocensura.
En aplicación de la Ley de Seguridad Digital, de imprecisa redacción, cualquiera puede ser condenado hasta a 10 años de prisión y fuertes multas por compartir sus legítimas opiniones en Internet. La pena por reiteración del delito puede ser cadena perpetua.
En los últimos cinco meses, las autoridades de Bangladesh han detenido a más de 60 personas en aplicación de la Ley de Seguridad Digital por publicar comentarios críticos sobre la primera ministra y su familia en Internet.
En agosto de 2018, el afamado fotógrafo Shahidul Alam fue detenido por la policía de Bangladesh y estuvo más de 100 días en prisión por unos comentarios que había hecho en una entrevista ofrecida al canal de Al Yazira en lengua inglesa, en los que criticaba la dureza con que el gobierno había reprimido las protestas estudiantiles para reivindicar carreteras más seguras.
"Una de las causas principales de que la imagen de Bangladesh se haya empañado ante el mundo es la represión de la libertad de expresión. Mientras continúen estas detenciones y siga en vigor esta legislación represiva, Bangladesh no podrá reclamar su sitio como economía pujante que respeta los derechos humanos", ha afirmado Saad Hammadi.