Viernes, 30 de noviembre, 2018

Jóvenes de Beirut actúan para abolir el sistema “kafala” tras participar en un taller de educación en derechos humanos (EDH)


En una pequeña librería y cafetería comunitaria —enclavada en plena zona de moda de Beirut, Mar Mikhael— estudiantes universitarios, jóvenes, activistas y trabajadores y trabajadoras migrantes se reunieron para compartir historias de opresión y resiliencia en un evento organizado por jóvenes voluntarios de Amnistía Internacional.

Al final del taller, se pidió a las personas que participaban elaborar un plan de acción para abordar una cuestión que sentían que era relevante en su país. “Así que decidimos trabajar sobre los derechos de los trabajadores migrantes y el sistema de kafala* en Líbano. El sistema de kafala es más que una simple cuestión laboral, es una cuestión de salud mental, una cuestión de derechos de las mujeres, una cuestión sociocultural; es más que sólo un aspecto.”

A través de reuniones constantes durante los meses siguientes, en estrecha colaboración con el equipo de EDH en la oficina regional de Amnistía Internacional en Beirut, jóvenes voluntarios y voluntarias comenzaron a planificar maneras participativas de conectar con una comunidad más amplia de jóvenes para sensibilizar sobre los derechos de los trabajadores y trabajadoras migrantes.

“Numerosas organizaciones y ONG han dedicado muchos años a trabajar sobre esta cuestión, de modo que queríamos colaborar y hallar maneras de implicar a diversas audiencias en este tema. Pensamos que nuestro impacto sería mayor en estudiantes universitarios y jóvenes activistas centrados en varias cuestiones. Nuestro objetivo era acceder a personas jóvenes comprometidas para que entendieran el sistema de kafala, el modo en que discrimina a los trabajadores y trabajadoras migrantes y cómo pueden contribuir a abolirlo".

Finalmente, el grupo organizó su primer evento, una noche de contar historias, con el propósito de involucrar a la juventud en esta cuestión. El grupo colaboró con la iniciativa de narración Cliffhangers, con sede en Beirut, y, con la ayuda también del centro comunitario para migrantes, invitaron a trabajadores y trabajadoras para que hablaran de sus historias. Cliffhangers ofreció orientación y apoyo a los trabajadores y trabajadoras para ayudarlos con sus habilidades comunicativas y trabajar en sus discursos a fin de lograr un buen resultado.

Dos trabajadores migrantes pronunciaron sentidos discursos. Los oradores impresionaron a la mayoría del público al hablar sobre las injusticias a las que se enfrentan y la realidad de su trabajo bajo este sistema. “Fue muy inspirador, el público incluso ovacionó de pie a la primera oradora”, recuerda Samrani. “Las personas de Líbano conocen esta cuestión, pero a menudo muchas de ellas no son conscientes de las políticas discriminatorias que el sistema de kafala lleva aparejadas. Mejorar las condiciones laborales y de vida de los trabajadores y trabajadoras migrantes va mucho más allá de decir “por favor y gracias”; lo fundamental es que son trabajadores y trabajadoras con derechos".

“Hubo una gran asistencia de público, el espacio se llenó con alrededor de 50 personas, desde estudiantes universitarios a trabajadores y trabajadoras migrantes y activistas. Después de que los trabajadores migrantes compartieran sus historias, el público no quería que concluyera el evento, así que a éste le siguió una sesión de micrófono abierto".

Es más, el grupo tuvo la oportunidad de debatir abiertamente sus objetivos para abolir el sistema de kafala y, como consecuencia de ello, alrededor de 20 personas se inscribieron al verse motivadas para implicarse y actuar, y convertirse en miembros de Amnistía Internacional.

Tras el éxito del primer evento, el objetivo del grupo es seguir explorando enfoques participativos y alternativos para sensibilizar, conectar con la comunidad de trabajadores y trabajadoras migrantes y reformar actitudes.

“Planeamos seguir colaborando con el Equipo de Educación en Derechos Humanos y con la persona responsable de campañas de la oficina regional de Amnistía Internacional en Beirut, así como con un grupo teatral local mediante el teatro interactivo para aumentar la sensibilización. Los enfoques de educación en derechos humanos nos han proporcionado un aprendizaje; tenemos intención de seguir implicando a más personas y hallar maneras de cambiar comportamientos y cuestionar actitudes".

Telling Stories of Oppression: the Kafala System from Helen Zein Eddine on Vimeo.

* Los trabajadores y trabajadoras domésticos migrantes que llegan a Líbano buscando trabajo lo hacen mediante el sistema de patrocinio conocido como “kafala”, que permite a los empleadores ejercer un control notable sobre sus vidas. Para entrar en el país, todos los trabajadores y trabajadoras domésticos migrantes en Líbano deben tener un “patrocinador”, quien también debe ser su empleador. Los trabajadores y trabajadoras migrantes necesitan el permiso de su patrocinador para cambiar de trabajo o dejarlo, y corren peligro de ser deportados sin ningún proceso de impugnación de dicha decisión si su empleador decide retirarles el patrocinio.

Por Roula Nasr.