En el evento se intercambiaron ideas sobre la situación de las mujeres y niñas que migran y se encuentran en situación de refugio, cómo ha sido la respuesta de los Estados receptores y los deberes de protección internacional de las que son sujeto 

Reflexiones del foro “Violencia contra la niña y la mujer refugiada venezolana”: Desafíos para la atención y prevención de abusos a mujeres con necesidades de protección internacional, evento online realizado por Amnistía Internacional Venezuela en el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 2021. A continuación las ideas más resaltantes de las panelistas: 

Nastassja Rojas Silva, Profesora de la Pontificia Universidad Javeriana (Colombia):

• Las mujeres representan la mitad de las personas migrantes en el mundo. La protección de las mujeres llega un poco tarde en cuanto a derechos.
• Los principios interamericanos de todas las personas migrantes por primera vez logran plasmar la necesidad de la protección y enfoque de género.
• Las mujeres refugiadas y migrantes en su mayoría se encuentran en situación de vulnerabilidad y mayor riesgo de violación de derechos humanos.
• El reconocimiento jurídico en temas de refugio es una gran brecha en el caso venezolano.
• Las mujeres migrantes son frecuentemente víctimas de redes de tratas, tráficos y estafas en los lugares de recepción. El Estado de origen como el receptor tiene deberes de protección.

Angye Suárez Mendoza, Colider de la línea de género de la Fundación Hablemos:

• En el paso por las trochas entre Venezuela y Colombia  las mujeres son víctimas de abuso sexual y son captadas por redes de trata y tráfico de personas.
• Se ha normalizado la violencia sexual para las mujeres migrantes venezolanas en Colombia. Los funcionarios de seguridad de ambos estados abusan de las mujeres y niñas.
• Mujeres venezolanas menores de edad son trabajadoras sexuales que piensan que su condición es normal. Están tan obligadas a ganarse la vida, que no tienen conciencia de lo que padecen.
• Cúcuta es una de las ciudades de Colombia con el 69.4% de trabajo informal y este viene camuflado con la trata y tráfico de personas.
• Ante la existencia 20 mil migrantes que entran y salen de Cúcuta, las charlas y talleres en educación en derechos humanos se quedan cortos en alcance.
• Se han registrado 345 niñas y mujeres venezolanas víctimas de violación en el paso ilegal hacia Cúcuta.
• Este año aumentó la cifra de suicidio de mujeres venezolanas migrantes ante las presiones y falta de oportunidades.

Erika Guevara Rosas, Directora Regional de Amnistía Internacional:

• El número de violencia y feminicidio va en aumento en nuestra región y dan muestra del fracaso de los Estados en implementar políticas que protejan a las mujeres.
• La migración forzada venezolana se ha ido feminizando. Son mujeres y niñas las que están escapando de sus países de origen porque sufren graves violaciones a sus derechos.
• La OIM registró que 50.2% de las personas que migran son mujeres y niñas venezolanas con necesidad de protección internacional. El 42% se encuentran sin estatus migratorio.
• Hemos escuchado expresiones de altos funcionarios de los países de recepción que exponen a las mujeres y niñas migrantes venezolanas.
• Las mujeres venezolanas no solo se ven expuestas a ser víctimas de trata y explotación, sino las que se dedican a trabajos sexuales  son criminalizadas.
• Debemos coadyuvar  los esfuerzos de las organizaciones de mujeres venezolanas refugiadas para que su trabajo se visibilice y los Estados tomen medidas para proteger a mujeres y niñas.
• Debemos seguir exigiendo la implementación de los tratados internacionales que abogan porque las mujeres estén libres de violencia.
• Amnistía Internacional se une en solidaridad con las mujeres y niñas venezolanas y ofrece su movimiento para que les sirva como plataforma y sus voces puedan ser escuchadas, bajo el contexto tan perverso que lamentablemente siguen enfrentando.
  
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