Martes, 18 de agosto, 2020
Gómez, Glendys
Las personas de la comunidad LGBTI sufren constantemente de discriminación, siendo blancos de asesinatos, violencia sexual, detenciones arbitrarias y torturas. Para Sakris en Finlandia no ha sido diferente y eso fue lo que llevó ha convertirse en un activista por los derechos humanos.
Sakris Kupila es un activista de Finlandia, estudiante de medicina quien descubrió en plena adolescencia que no se sentía cómodo con el género que se le asignó al nacer. Indica que luchó durante años, desdichado y encerrado en sí mismo, intentando averiguar cómo crecer en un mundo que trataba de empujarlo para asumir un rol totalmente equivocado.
En Finlandia, para poder cambiar de género legalmente y recibir atención médica especializada, las personas trans tienen que pasar durante un año por un reconocimiento psiquiátrico con el fin de obtener el diagnóstico de «trastorno de transexualidad»
Sakris se enfrentó a humillaciones, amenazas, acoso y palizas violentas, lo que lo obligó a dejar sus estudios por un año.
“La gente me silbaba, me escupía, decían cosas a mis padres. Incluso amigos cercanos dejaron de hablarme. Perdí mi sensación de seguridad”
Además del diagnóstico psiquiátrico el protocolo establecido por ley de Finlandia incluye la exigencia de pasar por un programa de esterilización forzosa o confirmar que “por alguna razón” ser estéril. El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas ha denunciado ese requisito, pero el Gobierno finlandés se ha negado modificar la ley conocida como ‘Trans Act’, aprobada en 2003, para eliminarlo.
“No soy estéril y no quiero serlo… me acuerdo del momento en que me di cuenta de que debía ser estéril para cambiar legalmente de género. Fue demoledor” “Me sentí muy mal. Me sentí un extraño, como un monstruo.”
“En Finlandia éramos invisibles. Muchos dicen que somos enfermos; por eso me hice activista”
Todas las personas tienen derecho a la libre expresión de la identidad.
Amnistía Internacional realizó una campaña para exigir al Gobierno finlandés que apoye a los defensores de los derechos humanos de las personas transgénero como Sakris y que haga que el procedimiento legal de la identidad de género sea rápido, accesible y respete los derechos humanos.