Miércoles, 31 de julio, 2019
Romero, Victoria

Yorm Bopha, es una mujer activista de derechos humanos en Camboya, madre de un niño que fue encarcelada desde septiembre de 2012 por falsas acusaciones de planear un asalto a dos hombres. Además se le condenó por  violencia intencional con circunstancias agravantes, a pesar de que no hay ni testimonios ni evidencia en su contra.


Según Amnistía Internacional Yorm Bopha es una presa de conciencia, ya que la verdadera razón de su encarcelamiento se debe a su activismo en favor de los derechos humanos de su comunidad en el antiguo lago Boeung Kak en la capital Phnom Penh, donde miles de personas habían sido desalojadas por la fuerza desde 2007.

"Nunca debería haber sido encarcelada, encerrada y separada de su pequeño hijo y su familia... El caso de Yorm Bopha es un símbolo de una tendencia preocupante en Camboya en los últimos años, donde los defensores de los derechos humanos enfrentan hostigamiento, amenazas, arresto, encarcelamiento por su activismo pacífico", manifestó Robert Abbott  investigador de Amnistía Internacional para Camboya.

Miembros de Amnistía Internacional en más de 40 países junto a miembros de su comunidad y otros activistas solicitaron al gobierno de Camboya que liberaran a Yorm Bopha, a través de la firma de peticiones, la difusión de sus fotos y mensajes de apoyo en línea para mostrar su solidaridad con la activista encarcelada por los derechos de la vivienda.

Tiempo después, luego de una gran campaña desarrollada por activistas, miembros y simpatizantes de Amnistía Internacional liberaron a la valiente defensora Yorm Bopha, demostrando que las campañas y el activismo realmente pueden marcar la diferencia en la vida de las personas que son víctimas de abusos y violaciones de los derechos humanos.

A pesar de esta victoria, Amnistía Internacional continuará apoyando a Yorm con sus campañas y peticiones hasta que sea absuelta y liberada sin condiciones.

Pocos días después de reunirse con su familia y comunidad, le dijo a Amnistía Internacional: “¡Gracias a los seguidores de Amnistía Internacional! ¡Su campaña ha sido exitosa, como lo demuestra mi liberación! Sin embargo mi caso aún no ha terminado. Los invito a que sigan presionando al gobierno camboyano para que cese el caso en mi contra. ¡Y por favor no olviden seguir apoyandonos tanto a mi comunidad y a otros defensores en Camboya! ¡Juntos podemos alcanzar grandes cosas cuando trabajamos unidos!

La historia de Yorm Bopha fue una de las más relevantes en el maratón de cartas de Amnistía Internacional para el año 2013 una de las más grandes campañas de derechos humanos del mundo.