Martes, 24 de julio, 2018
Ramos, Jorgen

Chile y Perú comparten enormes grados de desconfianza de sus jóvenes con el gobierno, el poder legislativo y judicial


El bajo desempeño de jóvenes en países latinoamericanos plantea desafíos sobre educación cívica y ciudadana. Un estudio a nivel internacional indica que la mitad de los estudiantes de Chile, Colombia, México, Perú y República Dominicana no logra demostrar algún conocimiento específico y comprensión sobre las instituciones, sistemas y conceptos cívicos y de ciudadanía. Estas son las conclusiones a nivel regional del IEA Estudio Internacional sobre Educación Cívica y Ciudadana (ICCS 2016), siendo estos cinco países los de menor desempeño dentro de los 24 sistemas educativos analizados.

Estos datos y el reto regional que representan fueron comentados durante la transmisión en línea de un evento regional sobre este estudio, realizado el 8 de noviembre de 2017 por la Asociación Internacional para la Evaluación del Logro Educativo

Realidad de Chile, Colombia, México, Perú y República Dominicana

Mientras que, en promedio y considerando los 24 sistemas educativos de la muestra, dos tercios de los estudiantes se encuentran en los dos niveles de desempeño más alto (A y B), en los cinco países participantes de la región ese promedio desciende a cerca de un 40%.

La realidad entre los cinco países no es homogénea. Perú y República Dominicana presentan un porcentaje de estudiantes mucho mayor en los niveles de desempeño más bajo (C, D y bajo D), de manera que más de un 60% de sus estudiantes se encuentran en estos niveles, a diferencia de Chile, Colombia y México donde ese porcentaje llega al 49%. Esto significa que aproximadamente la mitad de los estudiantes de los países participantes de la región no logra demostrar algún conocimiento específico y comprensión sobre las instituciones, sistemas y conceptos cívicos y de ciudadanía.

Variaciones sobre características de contexto

Género: Mientras que, en promedio, los países participantes muestran un resultado favorable para las mujeres (25 puntos por sobre el puntaje promedio de hombres), en los países latinoamericanos, Colombia y Perú logran disminuir esta brecha con diferencias de 9 y 6 puntos, respectivamente. Estos resultados son aún más destacables al considerar que 16 de los 24 países participantes tienen brechas de al menos 20 puntos de diferencia. Por otro lado, Chile (24), México (21) y República Dominicana (29) se encuentran dentro del promedio de la muestra internacional.

Inmigrantes: La brecha promedio de puntajes entre población no-inmigrante e inmigrante es de 44 puntos en la muestra completa. Tres de los cinco países latinoamericanos superan esta brecha: México (52), Perú (83) y Colombia (116) siendo este último el que tiene una brecha de casi 3 veces la correspondiente al promedio de los países participantes. Chile (26) y República Dominica (23), por otro lado, tienen brechas menores al promedio. El porcentaje de estudiantes inmigrantes, sin embargo, es bastante menor en los países de América Latina, comparado con el promedio del total los países participantes, que corresponde a un 7%, puesto que en ningún caso se supera el 3%.

Contexto socioeconómico: En el promedio de la muestra total la variable que más diferencias produce es el número de libros en el hogar, con 56 puntos promedio, mientras que la ocupación de los padres produce una brecha promedio de 35 puntos entre ambos grupos. En el caso latinoamericano, la educación de los padres es en Chile (58), República Dominicana (46) y México (45) la que más diferencias genera entre los dos grupos estudiados. En el caso de Perú, la brecha es de 49 puntos, pero superada por el número de libros en el hogar. Sólo Colombia rompe la tendencia de los países latinoamericanos con apenas 19 puntos de diferencia cuando se separa por educación de los padres. En este país, al igual que en Perú, el número de libros es la variable que más brecha genera-

Conocimiento cívico vs. corrupción

El estudio arrojó, por ejemplo, que Chile y Perú comparten enormes grados de desconfianza de sus jóvenes con el gobierno, el poder legislativo y judicial. Wolfram Schulz, director de Investigación de ACER's International Surveys Research Program indicó que este fenómeno se enmarca en el aumento del conocimiento cívico en los países participantes de la región, pero que existe una correlación negativa respecto a mayor conocimiento cívico y participación política activa. Al respecto, Elisa Salinas de la Agencia de Calidad de la Educación de Chile, indicó en su presentación que esta falta de confianza puede explicarse por la mayor percepción de corrupción en dichos países, por lo que la educación cívica y ciudadana “es un gran desafío para nuestro sistema educativo”, agregó. Esto indica que al aumentar el nivel de conocimiento cívico y de sus derechos como ciudadanos, la población se vuelve más consciente de las funciones del Estado y por ende, más sensibles ante los hechos de corrupción que pudiesen ocurrir.

En la encuesta, aplicada en el marco del estudio antes mencionado, la información sobre las actitudes y la confianza de los estudiantes de octavo grado (13-14 años) hacia el gobierno y sus instituciones indica que la mayoría de los estudiantes estaría de acuerdo con un gobierno dictatorial si este trae orden y seguridad (promedio de 69%) o beneficios económicos (promedio del 65%). Asimismo, la mayoría de los estudiantes expresó que no tenderían a respaldar una amplia gama de prácticas corruptas, pero el 53% estuvo de acuerdo con la idea de que los funcionarios públicos ayuden a los amigos dándoles empleo en su oficina. Los resultados revelaron que para el alumnado las escuelas son las instituciones más confiables.

Conocimiento cívico vs. discriminación

El estudio examinó la aceptación de los estudiantes de la diversidad del barrio, sus actitudes hacia la homosexualidad y las percepciones de discriminación contra los grupos sociales en su país. Los resultados muestran que las niñas y los estudiantes con puntaje más alto en conocimiento cívico expresaron una mayor aceptación de la diversidad. La encuesta también sugiere que las personas homosexuales constituyen un grupo que puede estar sufriendo el mayor grado de discriminación en la región. Sin embargo, el porcentaje de estudiantes que respalda el matrimonio entre personas del mismo sexo ha aumentado desde 2009.

Todo lo antes expuesto denota el largo camino que aún le falta por recorrer a Latinoamérica para lograr una sociedad más justa y respetuosa de los DDHH, lo que si está claro que la vía para conseguirlo es la educación cívica, entendiéndola como ese cumulo de conocimientos necesarios para el desarrollo pleno y armónico de un ciudadano en su entorno social

Es por ello, que es fundamental en cada país, en cada rincón del mundo, que se brinde educación cívica a los seres humanos, pues la misma, los va a hacer seres humanos más conscientes y empoderados de sus derechos humanos, al tener este conocimiento, podrán reclamar al Estado donde habiten, su eficaz cumplimiento y que se les brinden las garantías necesarias para su desarrollo armónico, “Una bala puede asesinar a una persona, una buena educación puede salvar a miles”

Fuentes consultadas

  • http://www.unesco.org/new/es/santiago/press-room/single-new/news/bajo_desempeno_de_jovenes_de_paises_latinoamericanos_en_e/
  • http://www.unesco.org/new/es/santiago/press-room/our-stories/encuesta-educacion-civica-ciudadana/