Viernes, 29 de junio, 2018
AIVEN, Equipo de Documentación

El 23 de mayo de 2018, Hebert Ramírez fue arbitrariamente detenido por funcionarios del SEBIN a escasos metros de su residencia, cuando caminaba hacia una concentración pacífica que se efectuaría momentos después, no tuvo derecho ni siquiera a contactar a su abogado de confianza. A más de un mes de su aprehensión, sus familiares no han podido verlo ni comunicarse con él, desconocen su estado de salud e integridad física, pese a las reiteradas denuncias hechas a las autoridades


Hebert Ramírez, padre de un niño de 7 años de edad, fue detenido el día 23 de mayo de 2018, sin orden judicial, por funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) luego de salir de su residencia en Sabana Grande, en la ciudad de Caracas, cuando se dirigía a una concentración que se llevaría a cabo en la Plaza Alfredo Sadel de Las Mercedes.

Seguidamente, funcionarios de dicho cuerpo de seguridad lo encerraron en un vehículo sin placas y le quitaron la llave del apartamento de su madre, la señora Aura Arcia, ingresaron sin orden de allanamiento y se llevaron todos los artefactos eléctricos y pertenencias que pudieron, que no se encontraban de ninguna manera vinculados con una eventual diligencia policial o investigación penal.

La noche del jueves 24 de mayo, Hebert Ramírez fue presentado ante un Tribunal de Caracas, donde le imputaron los delitos de Instigación al Odio, Detentación de Artefacto Explosivo y Agavillamiento, le impusieron un defensor público que, según narran sus familiares, no ejerció los recursos de Ley ante las graves inconsistencias existentes en el expediente.

Después de transcurrido más de un mes desde el día en que fue aprehendido, sus familiares y abogados de confianza no lo han podido ver, ni establecer comunicación telefónica alguna con él, por lo que se desconocen sus condiciones de reclusión, su estado de salud e integridad física; además el Estado no ha informado sobre su paradero, han sabido extraoficialmente que se encuentra en la sede del SEBIN ubicada en El Helicoide, sin embargo, los funcionarios le siguen diciendo que no está allí. Para su madre, Hebert Ramírez continúa desaparecido al no poder constatar dónde se encuentra recluido.

La señora Aura Arcia presentó dos denuncias ante el Ministerio Público, por privación ilegítima de libertad y violación de domicilio. Hasta el día de hoy, Amnistía Internacional no ha podido tener conocimiento sobre el inicio de una investigación penal.

El Estado sigue siendo responsable de la integridad personal de los detenidos que estén bajo su custodia y tiene la obligación de investigar exhaustiva e inmediatamente los hechos relacionados a posibles abusos por parte de funcionarios, así como determinar las sanciones que correspondan.